RIVER DERROTA A NACIONAL Y SE AFIRMA EN LA LIBERTADORES

El Diablito, que jugó en gran nivel, abrió la cuenta en un partido que siempre fue favorable para el Millo. Y en tiempo adicional, Colidio estiró sentenció el encuentro con un cabezazo.

River se pareció al de sus mejroes noches, al menos en agresividad y ánimo ofensivo, y para eso vbolvió a aprarse con dos delanteros y cuatro volantes sin experimentos

Además de Echeverri brillaron Nacho Fernández y como últimamnente el chileno Diaz

Una noche tranquila tuvo River, que no tuvo inconvenientes para derrotar 2-0 a Nacional de Uruguay, por la segunda fecha del Grupo G de la Copa Libertadores. Y quedar como líder con 6 puntos. Libertad de Paraguay y el Tricolor lo siguen con 3 y cierra Táchira de Venezuela sin unidades. Lo único que le quedó en el debe fue que no definió un partido que se le presentó sumamente favorable, siempre.

Quince minutos de Echeverri en gran nivel, le alcanzaron al Millo para establecer la diferencia en el marcador. Es que, de los pies y la inteligencia del Diablito, surgieron las mejores jugadas en ese tramo de encuentro. El juvenil fue un auténtico dolor de cabeza para la defensa visitante, ya que nunca encontró la forma para marcarlo, especialmente en la etapa inicial, Movedizo por todo el frente de ataque, Echeverri empezó haciendo daño por la derecha, sector en el que encontró a Solari, como un socio ideal. Y ya sobre el cuarto de hora, sacudió la red uruguaya, con un remate bajo contra el palo izquierdo desde 35 metros aproximadamente. Un 1-0 que era totalmente justificado.

A esa altura, el Bolso buscaba en la fuerza física la forma de emparejar un duelo que era claramente desigual (el arbitraje fue muy permisivo con los charrúas). Es que no podía hacer pie en el mediocampo, en parte, apurado por la presión local, y en otra, por las falencias propias en el manejo de la pelota.

Recién sobre la media hora, el Tricolor equilibrar el juego. Sin embargo, todo siguió siendo de los de Núñez, que se movieron a sus anchas.

Aun dentro de ese panorama esquivo, los dirigidos por Recoba casi empatan el encuentro cuando Ebere, a pura potencia, quedó mano a mano con Armani y sacó un disparo bajo que fue rechazado por el arquero.

En el epílogo, el juego se hizo más parejo por cierta reacción visitante, que provocó alguna zozobra defensiva. Ya en adicional, Colidio puso la cabeza para establecer el 2-0 y dejar los octavos de final un poco más cerca.