RESCATANDO LA HISTORIA: RESTAURACIÓN DE LIBROS EN LA IGLESIA CATEDRAL DE GOYA

El pasado 27 de enero se celebró el Día del Restaurador y Conservador, una fecha que resalta la labor crucial de aquellos dedicada a preservar el patrimonio cultural. En este contexto, Jorgelina Almeida, desde la ciudad de Rosario (Santa Fe), compartió detalles sobre su trabajo en la Iglesia Catedral de Goya, específicamente en la restauración de valiosos libros que datan desde 1819 hasta la actualidad.

En una entrevista telefónica con la 88.3 Radio Ciudad, Jorgelina Almeida reveló que fue contactada por el padre Adolfo Gutiérrez, en ese entonces párroco de la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, junto a su compañera Natalia Urquijo para abordar la restauración de libros, principalmente de bautismos, matrimonios y defunciones entre otros. Este proyecto abarcó un amplio período histórico, siendo el primer libro de defunción el punto de partida.

La restauradora destacó la diversidad de información contenida en los libros, abordando categorías sociales como el indio, el gaucho, el peón y esclavos, especialmente alrededor del año 1880. Algunos libros revelaron la presencia de esclavos en la ciudad, incluso en una época en que la esclavitud estaba llegando a su fin, especialmente en el norte del país.

Jorgelina resaltó la importancia histórica de estas revelaciones, subrayando la necesidad de conservar estos documentos. Además de restaurarlos, tuvo el privilegio de leerlos, sumergiéndose en la historia de los orígenes de la ciudad. Sin embargo, señaló la fragilidad de las hojas, destacando que algunos libros, como los números 6 y 20 de bautismo, eran irreparables debido a la extrema sequedad de las hojas.

“Lo dejamos todo restaurado. Los demás se restauraron en su totalidad. También dejamos una lista de tareas para que se puedan mantener. Lo que se pidió es que no se ojeen tanto los libros, hay que tener en cuenta que los primeros son del año 1819, esas hojas están muy quebradizas, débiles”, afirmó Jorgelina.

Además, sugirió en ese momento la digitalización de estos libros para preservar su contenido de manera más duradera.

Por su parte, para llevar a cabo la restauración, se utilizaron productos importados, y el proceso demandó tiempo y paciencia.

La experiencia en la Catedral fue enriquecedora, no solo por el trabajo realizado, sino también por el apoyo y la colaboración de la comunidad. Las restauradoras fueron convocadas en 2009 y originalmente planificaron concluir en 2012, pero se extendió debido a la incorporación del proyecto de digitalización, demostrando la importancia y la continuidad de estas iniciativas para preservar la historia.

DÍA INTERNACIONAL DEL CONSERVADOR RESTAURADOR

Es una fecha que se estableció en el XVIII Congreso Internacional de Conservación y Restauración de Bienes Culturales celebrado en Granada en 2011, estableciendo el 27 de enero como fecha oficial.

El objetivo de este día es rendir un homenaje a todos los conservadores y restauradores de piezas históricas y culturales del mundo.

Estas personas no solo adquieren un compromiso con los dueños de las piezas o los autores de las mismas, también con todas las personas del mundo, porque ellos son los encargados de preservar el legado cultural y artístico de la humanidad, así como salvaguardad las técnicas originarias con las cuales se crearon cada uno de los objetos que ellos restauran o conservan.

¿QUÉ HACE UN CONSERVADOR?

Un conservador, es la persona responsable de investigar, divulgar, exponer y ordenar las diferentes exhibiciones dentro de un museo. En pocas palabras, es la persona que documenta todo lo concerniente a un tema en particular, contacta a los diferentes museos y centros de investigación artística e histórica del mundo y genera una propuesta educativa para la sociedad.

También es quien resguarda las piezas mientras están bajo su supervisión, procurando que se mantengan limpias, sin daño alguno e incluso en ocasiones, pide que se restauren.

¿QUÉ HACE UN RESTAURADOR?

Un restaurador es el encargado de preservar una obra u objeto deteriorado, intentando llevarlo a su estado original en la medida de lo posible y así lograr que el objeto no mute a lo largo del tiempo.

Estos profesionales también se encargan de preservar las obras, estudiando sus componentes y evaluando cuales de sus características pueden ser deterioradas más rápidamente por el entorno. De esta forma el restaurador crea un ambiente propicio para que dicho deterioro se produzca más lentamente.

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