23 abril 2024

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SEQUÍA: EN LOS ÚLTIMOS TRES AÑOS EN ZONAS DE CORRIENTES SE PERDIÓ UN AÑO DE PRECIPITACIONES

SEQUÍA: EN LOS ÚLTIMOS TRES AÑOS EN ZONAS DE CORRIENTES SE PERDIÓ UN AÑO DE PRECIPITACIONES

Llovió en promedio 35% menos de lo normal, por lo que se perdió en algunas zonas un año de precipitaciones según estiman desde el INTA. El 95% de los incendios de este año afectaron a los humedales.

El ingeniero agrónomo Ditmar Kurtz, especialista del INTA Corrientes, en diálogo con Clarín indicó que continúa la reducción de la superficie cubierta por agua en Corrientes, relacionada directamente por bajas precipitaciones.

Kurtz aportó otro dato que marca la gravedad de la sequía que afecta a la provincia de Corrientes. “El promedio de superficie cubierta de agua ronda el 38,5% de la totalidad del territorio correntino, pero ahora, con la sequía que tenemos desde hace tres años, eso se redujo a sólo 8,6%”.

La pérdida de los espejos de agua fue paulatina. En diciembre de 2021 la superficie cubierta por agua ya había bajado a 1.274.583 hectáreas, y doce meses después se ubicaba en 1.081.525 hectáreas. La escasez hídrica se acentuó en el verano y hace una semana eran sólo 766.630 las hectáreas que permanecían cubiertas por agua en Corrientes.

Con una superficie total de 8,8 millones de hectáreas, Corrientes debería tener cerca de 3.1 millones de hectáreas cubiertas por esteros, bañados, ríos y arroyos, pero la prolongada sequía redujo caudales a cifras nunca antes vistas.

“Estamos en mínimos históricos de superficie cubierta con agua en la provincia, así que en general creo que se vienen meses duros”, advirtió el especialista del INTA.
El especialista sostuvo que “en los últimos tres años perdimos un año de precipitaciones, en el noroeste de la provincia, donde estamos nosotros, a 30 kilómetros al sur de la ciudad de Corrientes, viene lloviendo el 35% menos”, indicó.

En esa zona, el régimen normal de lluvias para enero es de 150 milímetros pero este año cayeron solo 50. En el mismo mes de 2022 apenas llegaron a recibir 5 milímetros y el área total cubierta con agua se ubicó en el 10% para esa fecha. En el centro sur correntino, en tanto, el año pasado llovió la mitad de lo habitual.

“Ahora estamos con el 8,6% de agua en toda la provincia, estamos resecos, la retracción de los cuerpos de agua es grave”, remarcó. Cabe señalar que, en años lluviosos, esa superficie llega hasta un 58% del territorio provincial.

Debido al déficit hídrico, entre los productores agropecuarios correntinos crece la preocupación sobre lo que les depararán los próximos meses en los que no tendrán pasto ni reservas como para mantener el estado corporal de la hacienda y lograr que las vacas se preñen.

“Si bien los animales todavía están bastante bien porque se han alimentado con esos pastizales que crecieron en la superficie que antes estaba ocupada por agua, las consecuencias se van a empezar a sentir en el otoño, el invierno, el inicio de la primavera y el año próximo, ya que va a faltar pasto, porque no creció durante enero o lo hizo muy poco”, explicó el ingeniero.

Kurtz expresó que “si bien los pronósticos indican que se van a empezar a normalizar las precipitaciones, los niveles que se esperan no van a ser de una abundancia tal que permita una recuperación veloz” de los humedales.

Al paso de La Niña, el evento climático caracterizado por una drástica disminución de las precipitaciones, la superficie cubierta con agua en la provincia de Corrientes cayó de un promedio de 40% al 8,6% en un lapso de tres años. Esos espacios húmedos perdidos fueron ocupados por pastizales que constituyen un material rápidamente combustible en épocas estivales de altas temperaturas y gran insolación. En esas tierras no hay personas asentadas ni actividades productivas y son de muy difícil acceso para la extinción de los incendios ya que ni siquiera existen caminos.

 

 

 

*Redacción momarandu.com con datos de Clarín.

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